Los TAÍNOS y su cultura
Los taínos, fueron habitantes
precolombinos y se establecieron en las Bahamas, las Antillas Mayores y el
norte de las Antillas Menores. Fueron los primeros habitantes del Caribe, llegando sobre el año 800 a.C. El término “taíno” significa “bueno” o “noble”.
Este pueblo llegó procedente de América del Sur, desde la desembocadura del río Orinoco, pasando de isla en
isla, reduciendo o asimilando a los pobladores más antiguos como los guanajatabeyes y los ciguayos.
Fueron los primeros nativos americanos con que se encontró Colón (1492) al llegar a las Bahamas y posteriormente también en Cuba (Juana), Quisqueya (La Española) y Boriquen (San Juan Bautista). Recibieron a los españoles como si fueran seres venidos del cielo y les trataron con gran hospitalidad y amabilidad ofreciéndoles todo lo que tenían. Llegaron a acuerdos políticos con los castellanos, llamados guatiaos, en los que ambas partes se prometían alianzas y ayudas recíprocas para combatir enemigos comunes (los caribes en el caso taíno).
Había cinco
cacicazgos taínos en el territorio de La Española (hoy Haití y República
Dominicana), cada uno dirigido por un cacique principal (jefe), a
quien se le rendía homenaje. Puerto Rico también fue dividida en
cacicazgos.
Al jefe o cacique de la tribu se le pagaba un tributo
significativo.
En el siglo XVIII, la sociedad taína había sido
devastada por enfermedades introducidas tales como la viruela,
así como otros factores tales como los matrimonios mixtos o interraciales y la
asimilación forzada a la economía de plantación que España impuso en
sus colonias del Caribe, con la posterior importación de trabajadores esclavos africanos.
Varios pueblos indígenas sobrevivieron hasta el siglo XIX
en Cuba.
Existían varias lenguas entre ellos: Taíno clásico y Taíno ciboney.
La evidencia lingüística conservada en algunas listas de vocabulario
muestra claramente el parentesco de su lengua con las lenguas arawak de
Sudamérica.
Grupos taínos a la llegada de los europeos, al final del
siglo XV. En verde, ubicación de los caribes, pueblo belicoso de origen
arahuaco como los taínos.
Sociedad
Se dividían en cuatro clases sociales: los naborias, los
nitaínos, los bohiques y el cacique. En la estructura sociopolítica, de
carácter teocrático-guerrero, el cacique y el bohique representan
los poderes sobrenaturales del día y la noche.
Los caciques practicaban la poligamia, infrecuente entre el común del pueblo. Esta práctica
estaba justificada por el exceso de muchachas en edad núbil, y porque entre los
taínos era un deshonor no tener hijos. Las relativas riquezas de los caciques,
su estatus, y las pocas aspiraciones del pueblo, permitían a éstos poseer
varias mujeres e hijos.
Las viviendas de los taínos albergaban a todo un grupo familiar, incluyendo abuelos, tíos, primos, etc.. Las casas eran de dos tipos: los bohíos y los caney de planta circular y techo cónico. También los había de planta rectangular, con pórtico y techos dobles, donde vivían los caciques.
Generalmente, las aldeas se agrupaban en torno a una plaza o plataforma para el juego de pelota llamada batey. Allí se celebraban las principales festividades, como los areítos (cantos y bailes) y la ceremonia de la cohoba.
Economía
La principal actividad económica de los taínos era la
agricultura; para lo cual construían sembrados que llamaban conucos.
Cultivaban
mandioca o yuca en sus variedades dulce y amarga, para lo cual empleaban abonos
y sistemas de riego; otros cultivos importantes eran: maíz, cacahuate (maní), pimienta, piña, batata,
algodón y tabaco.
Cazaban pequeños roedores como las jutías, iguanas, algunas
variedades de pájaros como la higuaca, y serpientes; pescaban con varias
técnicas empleando anzuelos, redes, veneno, etc.
Fabricaban objetos como la hamaca, camas de leña (coyes,
como las llamaban). Fermentaban la yuca para obtener una bebida embriagadora
llamada uicú o cusubí.
El casabe, que es una especie de pan de yuca o torta
circular de yuca tostada al sol o al fuego, formaba parte de su dieta regular y
es consumido aún hoy día en la zona del Caribe. Aún se fabrica en Venezuela
(utilizando una especie de yuca amarga), República Dominicana y en la región
oriental de Cuba.
Religión
Los taínos de La Española eran politeístas, creían en la existencia de varios dioses. Tenian un dios principal que era Yocaju Bagua Maorocoti, quien fue hijo de la diosa Atabey Yermao Gua.
Los taínos creían en dos seres sobrenaturales llamados cemíes que eran los progenitores de los demás. Estos dos padres creadores estaban simbolizados por ídolos de piedra, madera o barro, a quienes los indígenas rezaban sus oraciones, y en cuya presencia celebraban los ritos para implorar la abundancia de frutos y la dicha de la raza humana. Un grupo de estos seres sobrenaturales, los cemíes, tutelaban y representaban a los antepasados del clan.
La divinidad principal era YaYa. También se le conoce como Semign (que
significa "dios" en lengua arahuaca taína)
Se creía que Jurakan (origen del término huracán) era el dios del mal, puesto
que el panteón fue interpretado según la creencia dual del catolicismo. En
realidad, había varios espíritus que, cuando se unían, causaban destrucción al
pueblo taíno.
Juracán era el nombre que le daban los taínos a los fenómenos
atmosféricos conocidos hoy por huracanes y tormentas tropicales
El
monte más importante en la cultura taína era la montaña actualmente llamada El
Yunque, donde hacían las ceremonias principales para su dios.
Los hupia son los espíritus de los muertos, y se diferencian de los goeiza: espíritus de los vivos. Si bien la vida goeiza había forma clara, después de la muerte el espíritu se dio a conocer como un hupia y se fue a vivir al Coaybay.
Este animismo confería al Bohití o bohíque, médico brujo, grandes poderes, al ser el encargado capaz de comunicarse con los espíritus. Para este fin confeccionaban ídolos de algodón, piedra, hueso, concha y otros materiales, que recibían el nombre de cemíes. Los cemíes tenían poderes sobre el hombre, ya que en ellos residían los espíritus de antepasados muertos, rocas, árboles, etc.
Entretenimiento
Los taínos se divertían de diferentes maneras, a través del
baile, la música y el juego de pelota. Este último era conocido como batú y se
jugaba en un espacio llamado batey.
El juego despertó el interés de los
colonizadores españoles, debido a que la pelota que utilizaban (que estaba
hecha de las raíces de la planta llamada Cupey) rebotaba, y este fenómeno era
desconocido en Europa. El juego de pelota se jugaba entre 2 equipos de hasta 30
jugadores (hombres y mujeres) que tenían que mantener la bola en el aire con
sus hombros, codos, caderas o cualquier otra parte del cuerpo, excepto las
manos y los pies.
Batey o cancha ceremonial de batú
en Caguana, Puerto Rico.
Otro pasatiempo muy común eran las fiestas de palos, las cuales consistían en un baile que empezaba cuando se ponía el sol hasta la media noche; normalmente todos tomaban turnos para bailar, beber y comer. Su participación era solo para los más adultos, o para celebrar un casamiento entre dos prometidos.